Hacer clic en la imagen,para verla más grande.

martes, 5 de febrero de 2019

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.

Crónica Negra de España 75:


El accidente ferroviario de Valladolid de 1988 fue un accidente de tren que sucedió en la estación de Valladolid-Campo Grande (Valladolid) en la madrugada del 3 de marzo de 1988, que causó 8 muertos y 30 heridos al chocar los expresos "Cantabria" y "Costa Vasca" que, procedentes de Madrid, se dirigían a Santander y Bilbao, respectivamente. 
Los 8 muertos eran del primer tren.

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.
Foto: Jose Villarino Martin.

En la madrugada del 3 de marzo de 1988, sobre las 3 de la mañana, el maquinista del expreso "Costa Vasca" con origen en Madrid y destino Bilbao, se dio cuenta de que algo no iba bien cuando circulaba a 75 kilómetros por hora e intentó reducir, sin éxito, la velocidad. 
A poco más de un kilómetro para entrar en la estación de Valladolid tomó la drástica decisión de desconectar el fluido eléctrico y dejar sin potencia la locomotora. 
Pero no fue suficiente.

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.
Foto: Jose Villarino Martin.

El maquinista tuvo que saltar de la locomotora, colisionando el convoy contra el que estaba estacionado en Valladolid.
El impacto fue grave, arrugando como un acordeón el vagón cargado de coches situado en cola, llegando éste a incrustarse en el siguiente vagón del expreso, número 861 "Cantabria" procedente de Madrid y con destino a Santander, que se encontraba parado en el andén 1.1

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.
Foto:J.F.Bazaga,obtenida en 

El impacto sucedió muy rápido: el "Costa Vasca" embistió a 45 kilómetros por hora al convoy estacionado y provocó una tragedia que acabó con 8 muertos y 30 heridos. 
El hecho de haber una plataforma de coches en cola del "Cantabria" junto al coche cama fue una trampa mortal, pues aquella penetró como un par de cuchillas a lo largo de todo el vagón de camas. De haber habido otro tipo de vagón en cola (un furgón) se habría evitado esta circunstancia y posiblemente los fallecidos.

Aunque la causa principal del accidente fue un fallo en los frenos, el maquinista del tren que se dirigía a Bilbao no activó el sistema de emergencia.
Algunos meses después, el Juzgado de lo Penal número dos de Valladolid condenó al maquinista y a su ayudante a diez días de arresto menor y al pago de una multa de 75.000 pesetas por una falta de imprudencia.

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.
Foto: Juan José Romero Rioja.

Además, el juez dictaminó que deberían indemnizar con casi 2.300.000 pesetas a las dos únicas lesionadas que llevaron el caso a los tribunales. 
Desde el Gobierno se dieron algunas explicaciones más sobre las causas del accidente, pero fueron criticadas por ser de carácter muy técnico. 
Por ejemplo, «tener la locomotora 269-032 en su relé principal el cuerpo móvil de la válvula de corte agarrotado».

Los ocho fallecidos viajaban en el expreso "Cantabria" y eran originarios de la provincia del mismo nombre. 
Entre los fallecidos se encontraba el Consejero de Obras Públicas del Gobierno Cántabro, Félix Ducasse. 
Otro alto cargo del mismo gobierno, Juan Tarín, director general de Agricultura, quedó atrapado durante horas, siendo liberado por los bomberos.

Accidente ferroviario de Valladolid de 1988.
Estación de Valladolid-Campo Grande, lugar del siniestro.

El accidente provocó un gran impacto en la sociedad vallisoletana. 
Era la mayor tragedia en la capital desde los bombardeos de la guerra civil. 
A primera hora de la mañana, estaban allí casi todas las autoridades. 
El por entonces alcalde de la ciudad, Tomás Rodríguez Bolaños, se encontraba en Madrid, pero no faltaron el presidente de la Junta de Castilla y León, José María Aznar (futuro presidente del gobierno), el portavoz del Gobierno, el vallisoletano Miguel Ángel Rodríguez y el presidente de Renfe, Julián García Valverde.

Hasta tal punto tuvo impacto esta tragedia en Valladolid que al funeral de las 8 víctimas, que se celebró al día siguiente en la catedral de Valladolid, asistieron unas dos mil personas, aunque todos los fallecidos luego fueron trasladados a su lugar de origen, Cantabria, donde se les enterró.

Información extraída de este enlace: 

No hay comentarios:

Publicar un comentario